Obama queda bajo control republicano

La Cámara de Representantes pasa a manos de los conservadores y el Senado se mantiene bajo control de los demócratas  |  En los próximos dos años, el presidente deberá pactar con sus oponentes políticos cualquier reforma que emprenda.

El voto de castigo a la política de Barack Obama se cumplió en las elecciones a la cámara de representantes, donde John Boehner se convierte en el próximo hombre fuerte de la cámara y tercer cargo más importante de Estados Unidos. "Este es un claro mensaje de los ciudadanos para que el presidente cambie de rumbo", declaró Boehner tras los primeros resultados.

Fue una noche electoral de euforia para los republicanos, que consiguieron más escaños de los necesarios y que han recuperado parte del crédito perdido tras las presidenciales de 2008. A falta de los resultados definitivos, los republicanos obtienen más de los 39 escaños necesarios y podrían acercarse a una mayoría similar a la que tuvieron durante el mandato de Bill Clinton en 1994.

No obstante, el Partido Demócrata conserva el control del Senado por la mínima y los resultados en estados claves como Pensilvania, Ohio o Florida no han sido la debacle que las encuestas preveían. El Tea Party tendrá una voz en el Senado con la elección de dos de sus candidatos: Marco Rubio en Florida y Rand Paul en Kentucky. Rubio es una de los políticos con mayor proyección de Estados Unidos.

En los estados más simbólicos, reparto de poder: mientras el candidato demócrata Joe Manchin ganaba en Virginia Occidental -vacante tras las muerte de Robert Byrd, el senador más longevo de la historia del país-, el republicano Mark Kirk se hacía con el antiguo escaño del presidente Obama en Illinois.

Los demócratas ganaron varios gobiernos importantes, como en Nueva York y California, donde Andrew Cuomo y Jerry Brown serán gobernadores. Destaca la derrota en Delaware de la candidata republicana al Senado Christine O´Donnell y el triunfo del líder de la mayoría demócrata del Senado, Harry Reid en Nevada.