República Dominicana implementó ayer nuevos controles sanitarios para reabrir los mercados en la frontera con Haití, cerrados desde que comenzó la epidemia de cólera que ha provocado más de 700 muertos en ese país. El ministerio de Salud estableció inspecciones médicas cercanas a los lugares destinados al intercambio comercial e instaló baños y lavamanos móviles para los comerciantes. Los hospitales cercanos a los mercados fronterizos fueron habilitados con salas para atender posibles casos de cólera.
Comendador, Elías Piña. Bajo estrictas medidas de seguridad y manteniendo un cordón sanitario dispuesto por autoridades dominicanas, serán abiertos hoy los tres mercados binacionales de Dajabón, Jimaní y Elías Piña, con lo que se busca evitar que la población dominicana que acuda a vender o a comprar se contamine con el cólera, una enfermedad infecto contagiosa.
Los mercados funcionarán en áreas confinadas y cerradas. No podrán pasar alimentos cocinados.
Aunque en toda la frontera se han incrementado las medidas de higiene, las relaciones lucen tensas, pues comerciantes dominicanos y haitianos pujan para que se abran los mercados a la menor brevedad.
“Intereses económicos no van a poner en riesgo la salud del pueblo dominicano”, dijo al recorrer los tres puestos donde se abrirán hoy los mercados binacionales.
Tanto en Jimaní como en Elías Piña y Dajabón están activados los servicios de salud, las unidades de atención primaria están listas para eventualidades y se han dispuesto salas con camas sólo para esos fines. Las salas tienen salidas independientes
Dajabón. Alrededor del río Masacre estarán apostados militares del Cuerpo Especializado de Seguridad Fronteriza (Cesfront), quienes obligarán a todos los comerciantes a pasar por la puerta habilitada por las autoridades, por el puente nuevo.
Igualmente, a través del perifoneo, las autoridades instruirán a las personas a pasar por los lavamanos y llaves instalados con jabón de aseo.
En esta ciudad fronteriza se habilitó el mercado que es construido con fondos europeos en una extensa área, pero no está encementado. En esta frontera se reúnen los martes y viernes más de 18,000 personas.
En esta ciudad se instalarán hoy al menos 3,000 puestos, en los cuales los dominicanos venderán sus productos comestibles y los haitianos ropa, zapatos, perfumes y útiles diversos para el hogar.
La gente sabe de la necesidad de prevenir el cólera en Dajabón, pero sin ese mercado no hay vida, murmuraban parroquianos.
Jimaní y Elías Piña. Todas las personas de las comunidades de esta provincia y municipio han sido debidamente informadas del peligro que se cierne sobre el país por el cólera, pero viven del mercado y desean su apertura.
Las unidades de atención primaria han sido preparadas y dotadas de suero suficiente para la rehidratación oral, ante cualquier eventualidad de episodios diarréicos..
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El dinero
El gobierno dominicano cuenta con un fondo de RD$378 millones, los cuales serán sacados del 1% de los fondos de contingencia. Ese dinero será usado en caso de que la epidemia de cólera de Haití afecte a los dominicanos.
Pérdidas millonarias
Residentes en Dajabón aseguran que en casi un mes que tiene la epidemia desarrollándose, han perdido alrededor de RD$190 millones.
Disyuntiva
Las personas saben ya de la amenaza del cólera, pero la necesidad de vender para sobrevivir, los mantiene en una disyuntiva.
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